... la importancia del espacio...

Hace un tiempo, allá por marzo de 2012, escribimos acerca de los lugares comunes y lugares poco comunes…

La idea era contar (y que nos cuenten) en qué “lugares poco comunes” habíamos tenido sexo… algo divertido…

En esta oportunidad, la idea es otra. Si bien queremos hablar de “los lugares”, nos interesa ver, de qué modo, el lugar, el espacio, tiene que ver con lo que ahí sucede…

No es casual, que uno recuerde “aquel día que cogimos en tal lugar…” o “aquel polvo memorable en tal otro lugar…” casi siempre referimos “al lugar”…

Usualmente, se coge en la cama, en el dormitorio…


... es lo cotidiano... "lo normal"… hay muchas noches increíbles… también algunas mañanas y algunas tardes, por supuesto… sin embargo, por lo general, uno no recuerda todas esas increíbles noches y, sí recuerda casi todos los polvos “especiales” en otros lugares.




Venimos de pasar 20 días en un lugar maravilloso de la Riviera Maya… en un condominio muy lindo, que tenía una increíble vista al mar desde el living, con un inmenso balcón. Fue tan fuerte lo que pasó ahí, que nos motivó a comentarlo.

En cada sillón… en el piso… parados… sentados… en el balcón… de día… de noche… el lugar era una constante invitación…

... y, paradójicamente, el dormitorio no…

Si bien terminábamos en el dormitorio, todo el juego previo, todo lo memorable, ocurría en ese lugar… 






.. un día, llevamos el cochón al living, pero no fue lo mismo… "la magia del lugar" no era la misma…






En algo más de ocho años que llevamos juntos, recordamos distintos lugares… cada una de las vacaciones, cada “escapada de fin de semana”, cada encuentro con otra u otras parejas… recordamos “lo que hicimos ahí…” 

Está bueno cambiar los lugares, es una forma más de enriquecer el sexo… una forma de evitar la costumbre, la monotonía… de mantener la  posibilidad de la sorpresa, renovar las fantasías... en definitiva, enriquecer la relación…

¿qué opinan ustedes…???